Conceptos como hardware y software, CPU, memoria, dispositivos de almacenamiento, sistemas operativos y redes.
Explicar qué es un lenguaje de programación, para qué sirve y los tipos de lenguajes (compilados e interpretados).
Dar una visión general de los lenguajes más utilizados en la actualidad, y por qué se usan.
Hablar de elementos como variables, tipos de datos, operaciones, estructuras de control de flujo (if/else, bucles) y funciones.
Enseñar cómo descomponer un problema complejo en subproblemas más pequeños y manejables.
Contarlo todo de forma muy básica para evitar meterse en el módulo de Fundamentos de Programación (ya con python).
Introducir el uso de un IDE, como PyCharm o VSCode, así como los notebooks.
Hablar sobre el control de versiones con Git.
Mencionar buenas prácticas de programación, como la importancia de comentar el código y seguir convenciones de estilo (pythonic code).
Presentar conceptos como arrays, listas, conjuntos, diccionarios/mapas y árboles.
Enfocarlo no dentro de un lenguaje de programación específico, más a nivel de pseudocódigo también. El objetivo es que los estudiantes comprendan qué son, para qué se utilizan y cuándo podría ser apropiado utilizar una estructura de datos sobre otra.
Explicar qué es una base de datos, para qué se utiliza y qué tipos existen (por ejemplo, bases de datos relacionales y no relacionales).
Introducir conceptos clave como tabla, registro, campo, clave primaria y relaciones entre tablas.